viernes, 8 de febrero de 2008

El PP y la cultura del odio

Lo han vuelto a hacer. El PP continúa alimentando la cultura del odio. Ya se declararon claramente homófobos, condenando a una posible reprobación la Ley de Matrimonio Homosexual por supuesta inconstitucionalidad, cuando no puede haber una ley más constitucional. Ahora fomentan la xenofobia y proponen un sistema de control de inmigrantes basado en la sospecha y en darle la vuelta a la presunción de inocencia. Los inmigrantes que quieran venir a España tienen que firmar un contrato por el que se comprometen a aprender la lengua ( ¿cuál de ellas? ), respetar las costumbres ( ¿domingo a misa, brazo alzado con palma firme cantando con la cara al sol, perseguir comunistas, homosexuales y gente de malvivir, el 20N brazalete de luto, irse de putas pero que no se entere nadie, …?), cotizar y si en un año no encuentran trabajo, patadita en el culo. Me puedo imaginar que una comisión de voluntarios de la Conferencia Episcopal se puede ofrecer para redactar este manual de buenas costumbres españolas.

Rubalcaba afirma que esta propuesta electoral tiene un tufillo xenófobo, pero no es tufillo, es que apesta. ¿Tratarán de igual forma a los sauditas que se instalan en la costa?

Es curioso que si uno lee el ideario del Vlaams Belang ( partido de ultraderecha belga ), los planteamientos sobre inmigrantes coinciden bastante con el que hace el PP. Igual hasta pudiera ser que Filip Dewinter lleve una foto de Rajoy en su cartera y en cuanto se lo encuentre le va a pedir un autógrafo como buen fan incondicional ( ya es conocido que este líder de la ultraderecha considera al PP como el único y verdadero partido de derechas en Europa, y yo no puedo evitar recordar aquello de “la reserva espiritual de Occidente” ).

Cómo pueden explicar que los inmigrantes requieran un trato especial, más allá del cumplimiento de las leyes, como cualquier otro ciudadano. Es igual que cambiarse de acera cuando paseas de noche y alguien de color de piel oscuro viene hacia ti.

Cañete dice que echa de menos a los camareros de los de toda la vida, los que te untaban la tostada con manteca “colorá” ( se ve que a este señor le gusta mucho lo de la manteca ). Habrá muchos otros que echen de menos un buen limpiabotas , un muchacho flaco que venda el periódico por la calle, un afilador que recorre un barrio afilando los cuchillos de la gente bien, una criada de las de antes, a las que se podía tocar la cacha sin que te pusiera una denuncia por acoso sexual o hasta echar de menos el estraperlo con penicilina que te permitiera comprarle un buen abrigo de zorro ( el más apropiado en este caso ) a la amante y entregárselo a la salida de misa.

Menos mal que, si ganan las elecciones ( vade retro, Satanás ), se van a pasar los cuatro años plantando árboles y no van a tener tiempo de nada más. Me divierte pensar que a doña Espe le asignaran la plantación de tejos, hermosos, majestuosos árboles, pero, eso sí, tremendamente venenosos. Imagino también que Ana Botella se pide los frutales, eso de las peras y las manzanas lo conoce al dedillo ( y, por supuesto, nunca injertará un peral con un manzano, vete tú a saber qué engendro sale de ahí ). Y si falta terreno para plantar tanto árbol, hay fincas en los alrededores de la estación del AVE de Guadalajara que igual son idóneas para repoblar. O igual los campos de golf en el centro de Madrid cuentan como árboles plantados ( así ya van teniendo parte del trabajo hecho ).

1 comentario:

Anónimo dijo...

Por lo menos que los árboles sean de Marihuana, que así nos podemos estar endrogaos mientra gobiernos esta panda de fachas.
Un abrazo y gracias por tu comentario. El tuyo me ha encantado!!